Chile cuenta con un Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP) que incluye diversas categorías como parques nacionales, reservas nacionales y monumentos naturales, gestionado actualmente por la CONAF y en transición hacia un nuevo Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas. Estas áreas conservan el 20% del territorio nacional, protegiendo ecosistemas terrestres y marinos para su conservación y el patrimonio natural y cultural del país.